martes, 29 de noviembre de 2011

LA HOMOFOBIA DEL PP Y DE ALICIA SANCHEZ CAMACHO, Y UN POCO DE HISTORIA SOBRE EL APOYO CATÓLICO A LA CONSTITUCIÓN ACTUAL

LA HOMOFOBIA DEL PP Y DE ALICIA SANCHEZ CAMACHO, Y UN POCO DE HISTORIA SOBRE EL APOYO CATÓLICO A LA CONSTITUCIÓN ACTUAL

Lo dijimos muchos, y no se nos creyó: que el PP es un partido estructuralmente homofóbico. Se nos dijo que éramos unos exagerados, que la cosa no sería para tanto. Pero se van cumpliendo, punto por punto, las advertencias que dijimos.
Por de pronto, Alicia Sánchez Camacho (una catalana con un pedigrí catalán mejor que alguien llamado Bofarull, Rebull, Piqué, Pujol, vamos, catalana por los 8 costados....)ya adelanta que a los matrimonios LGTB se les va a impedir adoptar, y que van a dejar de llamarse matrimonio, para ponerle un nombre que le satisfaga a esa entidad religiosa responsable de todo tipo de crímenes e insidias durante siglos, que se hace llamar Iglesia Católica, encubridora de pederastas a través de los siglos, y en cuyo espejo se han mirado sistemas criminales como el Nazismo para intentar emular su historial de crímenes, sin haberles nunca alcanzado. Y es que es normal, la cabra siempre tira al monte...
Recordemos que, para la doctrina clásica de la Iglesia Católica, una mujer como ella, que tuvo un hijo soltera, durante la Dictadura Franquista habría sido catalogada de prostituta, y su hijo hubiera sido catalogado de ilegítimo, o bastardo. Y que si hubiera vivido durante el PreRenacimiento, hubiera sido lapidada porque así lo pedía la doctrina de la iglesia católica en aquellos tiempos para mujeres así.
Si las cosas han cambiado, si ya ni ella es catalogada de prostituta, ni apedreada, y su hijo no es llamado ilegítimo o bastardo, es gracias a los avances sociales y políticos protagonizados por partidos como el PSOE.
La Izquierda lucha por los avances políticos y sociales (más Democracia, mas Libertad, más Derechos Sociales para tod@s), la Derecha los torpedea y los intenta impedir, pero luego es la que más los usa. Ahora que el PP enarbola la Constitución de 1978 como si fuera la Sagrada Escritura, y se dicen sus defensores, no está de más recordar que, cuando hubo que votarla en 1978, el actual PP (antes AP, en tiempos de la Dictadura Franquista “El Movimiento Nacional” o FET Y DE LAS JONS) casi la mitad de sus diputados votó en contra (5 diputados de 14 en total, concretamente Gonzalo Fernández de la Mora y Mon (Ministro Obras Públicas 1970-1974), Albero Jarabo Payá (Delegado Nacional de Prensa y Radio del Movimiento), José Martínez Emperador (Presidente de la extinta Diputación de Madrid), Pedro de Mendizábal y Uriarte (Requeté vasco, abogado) y Federico Silva Muñoz (Ministro de Obras Públicas 1965-1970),de una Constitución que enterraba la Dictadura Franquista, y  que los ¿¿¿prestigiosos??? “intelectuales” católicos se manifestaron en contra, como decía el siguiente manifiesto:

Intelectuales españoles contra la Constitución
«La Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Española, reunida los días 26, 27 y 28 de septiembre, dejó a la conciencia de los fieles la decisión del voto en el próximo referéndum constitucional. Los abajo firmantes, en nuestra personal responsabilidad de católicos, deseamos, consecuentemente, exponer los motivos que en conciencia nos parecen decisivos. La Constitución que nos es propuesta no contiene el reconocimiento expreso de la autoridad de Dios que figura en los dos textos constitucionales de los pueblos más civilizados. Es decir, no hay en ella ninguna invocación de Dios como fundamento del orden moral recordado en las enseñanzas pontificias, reiteradas por Juan XXIII en Pacem in terris, 46, cuando repite: “La convivencia entre los hombres no puede ser ordenada y fecunda si no la preside una legítima autoridad que salvaguarde la ley y contribuya a la actuación del bien común en grado suficiente. Tal autoridad, como enseña San Pablo, deriva de Dios: Porque no hay autoridad que no venga de DIOS (Rom 13,1-6)” . Es más, la Constitución que se nos propone excluye todo fundamento que trascienda de la voluntad del pueblo español, del que emana todos los poderes del Estado (artículo 1 °, 2°). e incluso “la justicia emana del pueblo” (art. 17,1). Esto contradice lo que leemos en la Encíclica citada, número 78: ‘No puede ser aceptada como verdadera la posición doctrinal de aquéllos que erigen la voluntad de cada hombre en particular o de ciertas sociedades, como fuente primaria y única de donde brotan derechos y deberes y de donde provenga tanto la obligatoriedad de las constituciones como la autoridad de los poderes públicos.” La Constitución sometida a referéndum aparece como fuente formal única, invoca al pueblo como única fuente material que fundamenta derechos deberes, y deja en manos del Estado, como Demiurgo único, la regulación del matrimonio, de la familia, la educación y la economía en grado tal que el partido mayoritario, aunque sea el comunista, podrá desarrollar su programa sin salirse de la Constitución. Así estimamos que como católicos se nos sitúa ante el deber de votar «no» a este texto constitucional en cuanto que no se funda en un orden moral derivado de Dios, sino que proclama que todas las leyes e incluso la justicia misma dimanan de un pueblo, que vemos manipulando par la propaganda masivamente movida por los partidos políticos que “concurren a la formación y manifestación de la voluntad popular” (art. 6), subvencionados por el Estado por el solo hecho de ser mayoritarios, y convertidos así en oligarquías monopolistas. Es decir, nos obliga a votar «no» a un texto constitucional según el cual el número suplanta a Dios en la determinación de lo bueno y lo malo constituyendo una nueva religión laica, impuesta de un modo totalitario. Para comprobarlo basta la lectura del artículo 27, ap. 6, que sólo “reconoce a las personas físicas y jurídicas la libertad de creación de centros docentes dentro del respeto a los principios constitucionales”. Es decir, conforme esta norma constitucional ni siquiera se podrá permitir la enseñanza de que la ley y la justicia se fundan en el orden creado por Dios y por El manifestado en la Revelación y el Derecho Natural por cuanto esto chocará con lo proclamado como principio fundamental, en los artículos 1 y 1 17 que las declaran dimanantes de ese pueblo que, sin embargo, sólo podrá manifestarse por los cauces que la misma Constitución le determina. Los católicos votando a favor del texto constitucional prestaríamos nuestra adhesión, aunque sea inconscientemente, a este nuevo totalitarismo laico»
Relación de firmantes del manifiesto 
1.Don Ramón Abruña Fácil.
2. Don Rafael arado.
3. Don José Angel Ayala. 
4. Doña María Bonelli Rubio. 
5. Don Enrique avia. 
6. Don Jerónimo Calleja. 
7. Don Franncisco Canals Vidal. 
8. Don Jesús Cantera Ortiz de Urbina. 
9. Don Javier Carvajal Ferrer. 
10. Don Román Casares Lopez. 
11 Don Fernando Cibeira Otermín. 
12. Don Manuel Colomina. 
13. La condesa del Alcázar deToledo. 
14. Don José María Chico de GJmW 
15. Don Alejandro Díaz Macho. 
16. Don José María Díaz-Regañón López. 
17. Duque de Rivas. 
18. Don Carlos Estévez Moig 
19 Don Javier Echave-Sustaeta Arilla. 
20. Don Agustín Fernández. 
21. Don Francisco José Fernández de la Cigoña. 
22. Don Rafael Gambra. 
23. Don Andrés Gambra. 
24. Don José Miguel Gambra. 
25. Don Antonio García de Arangoa. 
26. Don Víctor García Hoz. 
27. Don Jesús García López. 
28. Don José Antonio García Noblejas. 
29. Don Julio Garrido Mareca. 
30. Don José María Gil Casares. 
31. Don Emilio Gómez Piñol. 
32. Don Alberto de la Hera Rivero. 
33. Don Leopoldo López Chaves. 
34. Don J. López Ibor. 
35. Don Salvador Mañero. 
36. Don Tomás Marín Martínez. 
37. Don Sebastián Mariner Bigorra. 
38. Don Juan José Martín González. 
39. Don Felipe Mateu González. 
40. Don Bermudo Meléndez Meléndez. 
41. Don Angel Montenegro Duque. 
42. Don Jaime Montero y García de Valdivia. 
43. Don José Navarro Latorre. 
44. Don Luis Núñez Contreras. 
45. Doña María de Pablos y Ramírez de Arellano. 
46.Don.Arsenio Pacios López. 
47. Don Angel Pariente Herrejo 
48. Rafael Pérez y Alvarez-Osorio. 
49. Don Mariano Puigdollers. 
50. Don Manuel de Rabanal Alvarez. 
51. Don Anselmo Romero Marín. 
52. Doña María Teresa Ruiz Alcón. 
53. Doña Antonia Ruiz Alcón. 
54. Don Andrés Salgado Ruiz-Tapiador. 
55. Don Ramón San Martín Casamada. 
56. Don Francisco Sevilla Benito. 
57. Don Fernando Solano Costas. 
58. Don Lorenzo Terual. 
59. Don Luis Valero Bermejo. 
60 Don Juan Vallet de Goytisolo. 
61. Don José Zafra Valverde.

Es decir, la Iglesia Católica Española NO APOYÓ el voto a favor de la actual Constitución, que tanto enarbolan ahora para negar derechos a los demás, si no que sus intelectuales orgánicos VOTARON EN CONTRA de la Democracia, lo que hace que, a día de hoy, ni la iglesia católica, ni sus intelectuales, estén legitimados para enarbolar una constitución contra la que se manifestaron.
Porque hay que tener memoria, para que no nos confundan.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Buenas tardes.
Yo vivo en la única ciudad de la provincia de Barcelona donde el Partido popular ha ganado en las elecciones Autonómicas y en las generales. Ciudad elegida por Don Mariano acompañado de la Sanchez Camacho para empezar su mega campaña auto publicitaria electoralista, Así que imagínate... :(
Por cierto, mí ciudad es CAstelldefels.
Suerte en el concurso de los 20blogs y feliz navidad ;)